certezas y dudas sobre los bebés asesinados por Hamás

certezas y dudas sobre los bebés asesinados por Hamás

La ofensiva sin precedentes sobre Israel de la organización terrorista islamista Hamás -iniciada el pasado sábado- ha provocado junto con la mortífera represalia israelí la peor oleada de muertes en años en Israel y la Franja de Gaza. En el Estado judío no se registraban tantas víctimas en un solo día desde el Holocausto durante la Segunda Guerra Mundial.

Sin embargo, además de la batalla por los cielos y la tierra, a la espera de la inminente incursión terrestre, el asesinato de bebés se ha convertido en símbolo de la barbarie de estos días. Aunque el número de menores y recién nacidos se cuentan al menos por decenas en ambos bandos, la guerra de propaganda se ha centrado en discutir si los islamistas de Hamás decapitaron o no a 40 bebés en el kibutz de Kfar Aza -a unos cinco kilómetros al este de la franja de Gaza- o «solo» los han masacrado.

Una periodista israelí habla de 40 bebés decapitados

Todo empieza el pasado martes cuando el Ejército israelí, recordando lo que hizo el ucraniano cuando se liberó Bucha de los rusos, abrió las puertas del kibutz a los periodistas nacionales e internacionales para poder dar cuenta de los crímenes de Hamás en su ofensiva. De todos los supuestos actos de los islamistas destacó uno que circuló como la pólvora.

Según una periodista israelí de la cadena de noticias local i24, especializada en información internacional, los militantes islamistas pasaron a cuchillo y decapitaron a 40 bebés. De pronto, el clip de poco más de 1 minuto se hizo viral al ser replicado por los principales medios del mundo (incluido este diario). Al cabo de las horas, varios de esos medios corrigieron la información y avisaron de que no se habían realizado las comprobaciones pertinentes.

Primeros matices y desmentidos

Horas más tarde, la agencia turca de noticias Anadolu contradecía esa versión y publicaba que al ejército israelí no le constaba esa información de que Hamás había decapitado a bebés.

Aterriza a la política española

En un primer momento, todas las informaciones se limitaron a replicar a la reportera, que en ningún momento había podido ver a los cuerpos sino que apenas difundía lo que le había comentado una fuente militar. En España, columnistas y políticos, como los populares Isabel Díaz Ayuso y Borja Sémper, se hicieron eco de la noticia. Acto seguido, la izquierda mediática empezó a utilizar como arma arrojadiza el tuit de Anadolu contra sus rivales políticos.

De pronto, el debate nacional pero también internacional se centraba en si Hamás había decapitado a los bebés o no más allá de haberlos matado, y otros medios empezaron a tratar de comprobar las informaciones que iban apareciendo. Además, la Comisión Europea acusaba a Elon Musk de permitir en su compañía X -antes conocida como Twitter- la difusión de bulos sobre la situación en Israel y de amenazar con la imposición de sanciones a la red social.

La Casa Blanca corrige a Biden

Después del maremágnum informativo, el presidente estadounidense Joe Biden hizo otra de las suyas: confirmó en rueda de prensa las imágenes atroces de bebés decapitados… Pero instantes después la propia Casa Blanca aclaraba que hablaba de oídas por lo que le habían comentado desde Tel Aviv y que no había visto fotografías de lo sucedido.

El toma y daca mediático continuaba. Israel empezaba a matizar desde sus cuentas: no estaba claro si eran 40 decapitados, sino asesinados. Empezaba la diplomacia israelí a difundir primero vídeos como uno en el que con dibujos de unicornio y estética claramente infantil apelaba a la audiencia tras la matanza de 40 bebés, pero hablando de asesinatos, no de decapitaciones.

«Hamás = ISIS»

En paralelo, desde la oficina de Netanyahu y las embajadas difundían el mensaje nítido de que Hamás era igual o peor que el ISIS (Estado Islámico). Así se lo transmitía a este diario la embajadora israelí en España, Rodica Radian-Gordon: «Es una guerra que que va a ser similar a lo que que hemos tenido con Daesh (Estado Islámico)». Pero a la pregunta sobre la polémica de los supuestos «bebés decapitados», la diplomática pedía no buscar la «pornografía gráfica» en la denuncia de las atrocidades de Hamás.

Israel empieza a difundir imágenes

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, le mostró este jueves también al jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, «abominables fotos de bebés asesinados y quemados por los monstruos de Hamas» el sábado, indica la oficina del jefe de gobierno.

Por último, desde este jueves, Israel ha estado difundiendo desde sus canales imágenes gráficas sobre bebés calcinados y masacrados [estas imágenes pueden herir su sensibilidad].  Y medios como ‘The Jerusalem Post‘ han publicado informaciones donde confirman, basándose en fotografías verificadas de los cuerpos, que «las informaciones sobre bebés quemados y decapitados en el asalto de Hamás a Kfar Aza son correctas».

Los niños, entre los más afectados por la guerra

Israel continúa bombardeando Gaza. Entretanto,  los niños se han convertido de forma intencional o no en uno de los principales objetivos en ambos lados de la guerra.

Hasta ahora, según Naciones Unidas, 447 niños palestinos han muerto en los ataques israelíes y suponen más de la mitad de los pacientes heridos en los desbordados hospitales de Gaza.

Por su parte, los niños israelíes también se encuentran entre los más de 150 secuestrados por militantes de Hamas el pasado sábado o asesinados en sus manos.