Se trata de un ataque con misil contra un centro de reparto de alimentos
Rusia ha cometido este jueves un nuevo crimen de guerra al bombardear un centro de reparto de alimentos que serva como cafetera en Groza, una localidad del distrito de Kupiansk, liberada de las tropas de la Z el pasado otoo. El ataque deja de momento 51 civiles muertos (incluido un nio de seis aos) y seis heridos.
La zona, que ha sido ya muy castigada por la invasin rusa, ha perdido a una buena parte de su poblacin, obligada a huir o refugiada en stanos. Muchos de ellos slo salen a comprar alimentos en los pocos comercios que an permanecen abiertos. En uno de ellos los rusos han puesto hoy el objetivo de su ataque. Desde sus bombardeos en la Siria rebelde, los ataques a las colas del pan se han vuelto una estrategia habitual del rgimen de Mosc para provocar la huida de civiles, la desmoralizacin y el terror de la poblacin.
El armamento utilizado es el habitual misil S300, un proyectil antiareo de enorme poder destructor que Rusia utiliza de forma balstica contra objetivos en tierra. En ciudades cercanas al frente su uso es diario por parte de Rusia, que posee un gran stock de este tipo de armamento de la era sovitica.
El frente de batalla, que se encuentra a unos kilmetros ms all de la ciudad de Kupiansk, ha obligado a evacuar varias localidades cercanas a los combates, ya que los bombardeos a mercados, iglesias o restaurantes estn a la orden del da por parte de Mosc.
Las vctimas del bombardeo asistan a una ceremonia en honor de un vecino fallecido, indic el ministro del Interior, Igor Klymenko: «Haba civiles en la tienda y en el caf [cercano], reunidos por una ceremonia en recuerdo de un aldeano fallecido».
«Un crimen claramente brutal de Rusia, un ataque con misil contra una tienda de productos alimentarios, un acto totalmente deliberado de terrorismo«, escribi Zelenski en su cuenta de Telegram, donde public una imagen del resultado del ataque, desde Granada.
El presidente ucraniano record que est en conversaciones con varios lderes europeos para reforzar las defensas antiareas ucranianas, an muy escasas en determinadas zonas del frente, y poder proteger mejor sus pueblos y ciudades de ataques como el de este jueves.
«Debemos parar el terror ruso», agreg Zelenski, que calific de «criminales» a «todos los que ayudan a Rusia a burlar las sanciones» que le impiden importar piezas de misiles y otros bienes que utiliza para producir armamento.
El problema es que estas zonas se encuentran tan cerca de la lnea de contacto entre rusos y ucranianos que no es fcil prevenir un ataque como ste. Desde que el misil es lanzado hasta que impacta transcurren slo unos segundos en los que no da tiempo ni a activar las alarmas o a tratar de derribarlo. La poblacin civil ucraniana est vendida ante estos proyectiles.